Bebés prematuros salen victoriosos y se gradúan en el Hospital de San Benito, Petén

Después de vivir su primera etapa de vida en el Hospital de San Benito, Petén, 7 bebés se graduaron, pues se consideran pacientes victoriosos al llegar a un peso estimado luego de haber nacido prematuros y con bajo peso. La toga y el birrete son el símbolo de que los pequeños guerreros pueden ir a casa con su familia, aunque continúan con un seguimiento constante. 

Los bebes prematuros y de bajo peso, necesitan cuidados especiales como: control en su termorregulación, patrón respiratorio y alimentación. Debido a la inmadurez que existe en sus órganos, los predispone a presentar complicaciones frecuentes, por lo que sus signos vitales y ganancia de peso son monitoreados  contantemente.

Parte del tratamiento para la recuperación de los recién nacidos es ingresar al Programa Madre Canguro, el cual se basa en el contacto piel con piel entre madre y bebé. Se ha demostrado que es una de las prácticas más efectivas para salvar a recién nacidos en riesgo. 

Durante este año, en el Hospital de San Benito han nacido 63 bebés prematuros y con bajo peso, quienes han ingresado al Programa Madre Canguro y han recibido los cuidados necesarios; muchos se graduaron y se fueron a casa con sus familiares.